R que R con el medio ambiente…. Unas semanas donde el protagonismo lo tiene la naturaleza y todo su entorno.
Comenzamos la semana acercándonos al campo con una misión, la de repoblación. Utilizando la técnica del Nendo Dango (barro con semillas) hicimos unas bombas de semillas que luego de excursión lanzamos al monte, para que cuando llueva germinen y los insectos y los pájaros no se coman antes.
A los pekes les encanta amasar el barro y hacer toda esta elaboración, pero el momento de máxima euforia es el lanzamiento, cogen la bola y con todas las ganas la lanzan para que llegue lejos con la esperanza que pronto nazca una planta.
Construcción de tipis… les encanta poder crear sus propias “guaridas”. Telas, bloques, mesas… y otros objetos son los materiales para levantar esos refugios donde después cantan y cuentan chistes como antes se hacía en los filandones entorno al fuego.
Aunque en el cole siempre trabajan el reciclaje, nosotros tuvimos una jornada especifica de la mano de Luz de Luna, que nos contó una historia de la Casa más grande del Mundo, y luego hicimos el juego del reciclaje…donde todo estaba lleno de objetos que teníamos que llevar a reciclar a diferentes contenedores.
Otro de los cuentos de esta semana, fue la pequeña Oruga glotona, contado por piedras que hablan, ¿conoces este método? Es muy divertido, un día cuando salgas al campo coge unas piedras, haz un dibujo sobre ellas y después solo tendrás que usar tu imaginación….
También nos acercamos al fondo del mar, para ver cuantos plásticos hay y como afecta al fondo marino y a todos los peces que allí hay. Como recuerdo, nos hicimos unas medusas de colores y luego nos dimos un chapuzón en el hinchable acuático.
Otra excursión que tuvimos fue para ver animales y aves. Costo un poquito, necesitábamos mucho silencio, pero ver una gran águila mereció la pena.
Esta mañana teníamos otra sorpresa, no solo mirar por prismáticos… La UNED nos había invitado a conocer su centro, y después de ver en la biblioteca libros de pájaros y animales, nos dejaron entrar al laboratorio donde estaban los microscopios, esto sí que resulto interesante… una gran curiosidad para mirar aquello tan pequeñito.