Recuerdo cuando era pequeña y pasaba horas jugando con los títeres en casa. Primero le decía a mamá, que me diera un calcetín viejo, luego buscaba algún tapón o algo para poner ojos, boca…. una vez tenía al personaje, montaba el teatrillo. Subía al desván por alguna sábana, colocaba dos sillas, y yo me escondía detrás. Esperaba a que papá llegará de trabajar para sentarlo en el sillón junto a mi hermano pequeño “un público muy exigente” y con ayuda de mi abuela, comenzaba a recrear historias, las risas se escuchaban desde la calle.
Los títeres no solo eran divertidos, sino que también estimulaban nuestra creatividad además de dejar volar nuestra imaginación. Por eso este año, para celebrar el Día del Libro en #campalek decidí montar el teatrillo y dar vida a diferentes títeres y marionetas que guardaba desde hace años.
Cuando llegaron los pekes, primero tuvimos buscar unos libros que el Duende Verde había perdido. Aquí te dejo el vídeo. Resulta que el muy travieso después del #cumpleLoko se dedico a llenar de libros, el hinchable, los toboganes, el capo de fútbol…. y nos propuesto un reto con una serie de pistas. Así fue la manera de conseguir que todos los libros volvieran a la biblioteca. Es que este duende es muy trasto.
Después de tanto correr para encontrar los libros, nos tomamos un descanso para colorear un marcapáginas o la manualidad donde el protagonista era el libro. Los peke artistas dieron rienda suelta a su creatividad con los colores, el título del libro o la historia que escribirían.
La mañana iba transcurriendo entre risas y juegos, merienda, tiempo libre y por fin, llegaron los títeres. La obra se titulaba “La Ciudad de Gaturguga” una ciudad en la selva, donde vivían animales muy feroces… pues este día iban a celebrar el cumpleaños del rey León, que cumplía 90 años, le estaban preparando una gran fiesta… si quieres saber que paso después en 3 minutos puedes ver el resumen de los mejores momentos.
Y como no podía ser de otra manera, después de la representación todos y todas pudieron colocar en sus manos a los muñecos, hacer las vocecillas que les dan vida contando sus historias, esconderse detrás del teatrillo, saludar al público, contar un montón de chistes, cantar sus canciones favoritas…